LA FAMA

Cuando reconocen a alguien, ya sea por su trayectoria, labor humanitaria, por ser un buen amigo, pareja, etc. se siente chido. Y si quieres a esa persona, más. Sin embargo, la chamba en los medios no siempre es taaan increíble como la pintan. Hoy estuve platicando con un par de amigos maravillosos muy famosos, y el tema: la fama. Parece mentira que las estrellas (en la música, telenovelas, películas, etc) son envidiadas por millones de personas. Se para en un lugar y todos quieren llevarse "un pedazo de ellos", como si estuviéramos en Chapultepec y escucháramos al wey: "Lléeevese la foto del recuerdo, las orejas, el rabo"... Y sí, están rodeados de personas pero muchos de esos tan enviados famosos viven y mueren paradójicamente: solos. Hay a quienes las personas más cercanas, managers-asistentes-choferes, los traicionan ventilando los secretos más oscuros de su vida privada, cuando son más vulnerables. O en los casos más dramáticos les quitan la vida. Chale, a ellos les recomiendo que se metan en la maleta ¡y se vayan a la chinada! Moraleja: Una vez más ten cuidado de quién te rodea. No permitas que cualquiera se entere de tu vida privada aunque te sientas solo. Famosos no blufeen tanto, ¡cuídense! pues provocan obsesiones, envidias... 

Por otro lado, antes de pedir piensa dos veces si en realidad es eso lo que quieres. Dulces sueños ¡camaradas!

Lo peor en éste caso: la vieja ésta consiguió su objetivo: ser famosa.