Si fueras Dios y estuvieras del otro lado, seguro te morirías de la risa con las peticiones de algunos mortales, y seguro con otras querrías ¡volver a morirte!
¿Te has puesto a pensar en la cantidad de cosas que le has pedido?
Algunas seguramente absurdas como: "No estudié, please que pueda copiarle al teto, digo al niño que se sienta aladoquenosecómosellama". O "que se le ponche la llanta a mi jefe ¡para que no llegue a molestingarme!", "Por fa Dios, hazme el milagro que México gane en el mundial" o "creo que debes llevarte ya a mi suegra... ya está entrada en años, es cuestión de piedad...".
En fin, la lista podría seguir infinitamente, sin embargo, hoy vi a una persona que seguro pediría algo importante, un hermoso señor en una silla de ruedas...
La siguiente vez que pidas... piensa si en verdad es algo importante...
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